De caminata por el río Pindo Chico (reseña de la ordenanza que protege los bosques de Puyo)

En uno de esos domingos de sol intenso y de cielo azul, nos reunimos algunas hormigas para caminar por los bosques tropicales del paso lateral, específicamente por la micro cuenca del río Pindo Chico, desde el inicio de la caminata era impresionante ver como otro mundo se abre ante nuestros ojos, tan cerca de una ciudad que crece intensamente amenazando la selva, estaba el mundo verde ¿escondido? ¿a la vista de todos? no sabemos, pero esta ahí, existe, es real, se siente, se huele, se toca, te mojas, ese espacio natural en el cual vivieron culturas ancestrales hace miles de años en armonía, tan solo queda una parte que como tesoro debemos cuidar.

Nuestros primeros pasos nos llevaron a un hermoso remanso, el mejor de todos para nadar y refrescarse del intenso calor, mientras continuábamos caminando por el río no podíamos dejar de notar que había descendido su caudal original en un 50%, producto del calentamiento global, producto de la deforestación y sobre todo de la ambición e ignorancia del ser humano, mientras continuábamos la caminata íbamos encontrando hermosos paisajes, grandes rocas en medio del río, inmensos árboles, palmas, guarumos, balsa, pigues, paja toquilla, helechos gigantes, lianas, matapalos, hacha caspis, orquídeas, heliconias, bandadas de chaguamangos, periquitos, mariposas, mantis, arañas gigantes en el río, arañas sicodélicas en los árboles y el sonido mágico del río descendiendo y chocando contra las rocas.

Saber que este refugio natural esta amenazado de desaparecer y que estuvo a un paso de ser destruido por la ambición de la venta de lotes nos causaba mayor respeto y admiración a la zona, es realmente impresionante estar en un ambiente natural como este, es uno de los pocos lugares en Puyo donde se puede bañar con seguridad, los demás ríos en Puyo están contaminados producto de la irresponsabilidad, desidia, ignorancia y desprecio de las autoridades a las cuencas hidrográficas que rodea y cruzan por Puyo.

Nuestra caminata hubiera sido realmente perfecta si no hubiéramos encontrado a cada paso botellas de plástico y basura por los bordes del río, aprovechamos para limpiar la zona, reflexionando sobre la amenaza de que se convierta en un balneario público sin control, así que además de disfrutar de una caminata de más de dos horas, pudimos refrescarnos en sus aguas todavía limpias y tomar fotografías que para nada reflejan la realidad de este lugar natural, conocer esta parte de la ciudad nos compromete a seguir luchando por defender nuestra Pachamama con más inspiración y argumentos, a los amigos les invitamos a visitar el lugar con respeto, sin plástico, comida, perros, ni basura, con botas, poncho de aguas, agua, frutas y cámara para capturar hermosos paisajes y con suerte animales.

Tenemos suerte de que esta zona haya sido protegida mediante una ordenanza del Municipio de Puyo la cual la considera área de conservación ecológica y es el limite de expansión urbana de Puyo, triunfo obtenido gracias a la tenacidad de sus pobladores y a un alcalde que sintoniza con las necesidades de la ciudad, por el otro lado existen personas que no valoran la importancia de estos bosques tropicales terratenientes que tienen demasiada tierra en sus manos listos para la ganadería, lotización u otro fin menos el de conservar.

Uno de los argumentos de los terratenientes para permitir que los bosques tropicales del paso lateral en Puyo sean arrasados, para convertirlos en proyectos de urbanización y lotización fue, el de que son bosques secundarios y que por lo tanto no tienen ningún valor ecológico, además de que existen lugares convertidos en pastizales, la zona prácticamente era un desierto donde no existía nada que proteger según ellos.

La noche en la que se decidía el futuro de estos bosques escuchamos argumentos absurdos, como el que el nivel de las montañas (30 grados), no presentaba ningún peligro de deslaves para las nuevas casas que se hubieran construido ahí, los argumentos de los terratenientes solo mostraban la desesperación por que el negocio millonario de las venta de lotes se les estaba yendo de las manos, estos terratenientes querían que la ciudadanía no conozca que existe una verdadera y compleja red de micro cuencas hidrográficas en toda la zona montañosa del paso lateral y sobre todo bosques tropicales llenos de especies animales y vegetales, un verdadero paraíso a tan solo una calle de la ciudad de Puyo.

Las extensiones de los terrenos que poseen estos terratenientes son realmente grandes, solo uno de ellos superaba las 150 hectáreas, si cada lote de 1.000 metros se vendía en 5.000 dólares, haga usted la cuenta y entienda el por que de la oposición de los propietarios y de algunos concejales del Cantón Pastaza a la propuesta del Alcalde de crear una ordenanza nueva que dejaba sin efecto la ordenanza que permitía la expansión de la ciudad en esta zona de conservación ecológica, la ordenanza aprobada esa noche de manera unánime, regreso a los limites de expansión urbana anteriores, en el cual indicaba que la ciudad de Puyo tendría como limite el paso lateral, de esta manera protegiendo los bosques tropicales de la ciudad.

La ambición desmedida se pudo sentir en la reunión realizada en el salón de la ciudad y convocada por el alcalde a ciudadanos, organizaciones e instituciones, quienes pudimos escuchar los argumentos de los propietarios que iban contra toda lógica y sobre todo de desprecio a un ecosistema tan rico en diversidad y tan importante para la conservación el mundo como son los bosques tropicales.

La Federación de Barrios de Puyo, La Fundación para el Desarrollo y Conservación de la Amazonia, La Asociación de Hoteleros de Pastaza, La Organización Ecológica La Hormiga, y los ciudadanos, fueron protagonistas de una histórica decisión en la ciudad esa noche, muestra de que la sensatez, el futuro, la visión y el amor a nuestra tierra primaron por encima del interés de unos pocos, los problemas ambientales en Puyo son muchos, los retos son enormes y los sueños parecen imposibles, pero sabemos que ninguna lucha es fácil, que se hace camino al andar, seguiremos como hormigas trabajando arduamente por que podamos construir el futuro haciendo justicia el presente.

Disfruten de las fotografías y compartan este mensaje a los suyos es tiempo de ser actores y no pasivos observadores, se el cambio que quieres ver el mundo, una ciudad se juzga según como trate a su naturaleza, únete a La Hormiga y juntos trabajemos por la Pachamama!